El expresidente estadounidense Donald Trump dijo este sábado que espera ser «arrestado» el próximo martes y llamó a sus seguidores a protestar, ante una posible acusación en su contra por el pago de dinero para silenciar a una actriz porno.
Señalando «filtraciones» de la oficina del fiscal de distrito de Manhattan, Trump, que aspira a volver a competir por la Casa Blanca en 2024, escribió en su red social Social Truth, en letras mayúsculas: «El principal candidato republicano y expresidente de los Estados Unidos de América será arrestado el martes de la próxima semana. ¡Protesta, recupera nuestra nación!».
Los rumores se multiplican desde hace unos días sobre una posible acusación penal de Trump por parte de un gran jurado, en el marco de la investigación dirigida por el fiscal de distrito del estado de Nueva York, Alvin Bragg, un magistrado electo demócrata.
En Estados Unidos, los fiscales pueden presentar testigos y pruebas frente a un panel de ciudadanos conocido como gran jurado, que luego decide si hay un caso por el que se debe responder.
Si fuera inculpado, Trump, de 76 años, se convertiría en el primer expresidente estadounidense acusado de un delito. Esto afectaría su posibilidad de convertirse en el candidato presidencial republicano para las elecciones de 2024.
El viernes, uno de los abogados de Trump, Joseph Tacopina, dijo a periodistas que su cliente comparecería ante la justicia de Nueva York si fuera acusado.
Envuelto en varios casos judiciales, pero nunca inculpado, el expresidente republicano (2017-2021) podría ver materializada esta amenaza en los tribunales de Nueva York.
La investigación dirigida por Bragg se centra en un pago de 130.000 dólares realizado dos semanas antes de las elecciones presidenciales de 2016, las cuales ganó Trump, a una actriz porno conocida como Stormy Daniels.
Supuestamente, el dinero estaba destinado a evitar que Daniels, cuyo verdadero nombre es Stephanie Clifford, revelara públicamente una relación que dice haber mantenido con Trump algunos años antes.
Trump ha negado reiteradamente una aventura con Daniels y desestimó la investigación alegando que tiene motivos políticos.
En su publicación este sábado en Truth Social, Trump se refirió a «filtraciones ilegales de una oficina del fiscal de distrito de Manhattan corrupta y altamente politizada», y dijo que la investigación estaba «basada en un cuento de hadas viejo y completamente desacreditado (¡por muchos otros fiscales!)».
– Invitación a testificar –
Daniels se reunió con los fiscales el miércoles y «acordó estar disponible como testigo o para una mayor investigación si fuera necesario», según su abogado Charles Brewster.
A principios de marzo, el equipo del fiscal Bragg le dio a Trump la oportunidad de testificar, pero se espera que la rechace para evitar incriminarse. Los expertos dicen que esa invitación es una señal de que es casi seguro que será inculpado.
El lunes, el exabogado convertido en enemigo de Trump, Michael Cohen, testificó ante un gran jurado en Nueva York. El pago a Daniels fue realizado por Cohen, quien dijo que luego se le reembolsó.
Ese pago, si no se contabiliza adecuadamente, podría resultar en un cargo por delito menor relacionado con la falsificación de registros comerciales. Eso podría elevarse a un delito grave si la contabilidad falsa tenía la intención de encubrir un segundo delito, como una violación de financiamiento de campaña, informó el diario The New York Times.
Trump enfrenta varias investigaciones penales a nivel estatal y federal por posibles irregularidades antes, durante y después de su mandato las cuales amenazan su nueva carrera en la Casa Blanca.
En Georgia, un fiscal investiga los intentos de Trump y sus aliados para anular la derrota electoral del mandatario en 2020 en ese estado sureño. El gran jurado en ese caso ha recomendado múltiples acusaciones, reveló la presidenta el mes pasado.
También es objeto de una investigación federal sobre su manejo de documentos clasificados, así como su posible participación en la violenta invasión del Capitolio -sede del Congreso de Estados Unidos- el 6 de enero de 2021.
Convencido de que el demócrata Joe Biden le «robó» las elecciones de 2020, Trump ya había llamado a sus seguidores a movilizarse y avivar la crisis política en Washington, en particular el 6 de enero de 2021 y en el ataque al Capitolio.