A las 19.10 de este lunes, el ministro de Educación, Edgar Pary, y la dirigencia de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB) reinstalaron el diálogo con el fin de encontrar una solución al conflicto que lleva cinco semanas.
La reunión se realiza en instalaciones de un conocido hotel de La Paz, a unos metros del edificio del Ministerio de Educación, que permanece con fuerte custodia policial ante la vigilia de los maestros movilizados y luego de enfrentamientos reportados la mañana de este lunes.
La mesa de diálogo se instaló con el ofrecimiento público del Gobierno nacional de flexibilizar la aplicación de los contenidos actualizados de la malla curricular y el incremento a 16.000 horas para cubrir el déficit histórico: 8.000 para los maestros urbanos y 8.000 para los rurales.
Los temas presupuestarios y del Congreso de Educación fueron remitidos a la comisión que el Gobierno instaló con la Central Obrera Boliviana (COB), ente que también representa a los maestros.
Previo al encuentro, el ministro de Educación se reunió con la dirigencia de la Confederación Nacional de Maestros de Educación Urbana de Bolivia (CONMERB).
Rudy Callisaya, de la CONMERB, indicó que las 8.000 horas son la base de la negación y aseguró que como resultado de la negociación se podría incrementar a 12.000 horas.
Además, abrió la posibilidad de que la aplicación de los nuevos contenidos de la malla curricular no tenga un carácter obligatorio.
Los maestros urbanos iniciaron en marzo sus protestas y si bien objetaron la actualización de algunos contenidos de la malla curricular, éste no fue parte de su pliego de más de 200 puntos que presentó al Ministerio de Educación en un principio y como base de negociación.