Confirman cuarto foco de gripe aviar en Boquerón, Paraguay
El Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal de Paraguay (Senacsa) emitió este martes un comunicado donde confirma el cuarto foco de gripe aviar en el distrito de Faro Moro, ubicado en el departamento de Boquerón, Chaco en la región Occidental del país suramericano.
“Hasta el momento se reportan cuatro focos de la enfermedad”, acotó el comunicado, que recalca además que es seguro el consumo de productos avícolas como carne y huevo, siempre que sean previamente cocidos.
En este sentido, aseguró que el estatus de país libre de la infección por los virus de la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad en aves de Corral no se pierde por los focos detectados en aves de traspatio.
Con la intención de prevenir la propagación del virus de la Influenza Aviar, el Senacsa ha reforzado medidas de control y emprendido labores de desinfección de los medios de transporte que circulen por las barreras sanitarias dispuestas en el departamento de Boquerón.
En esta jornada, el director de Epidemiología de la institución, Carlos Ramírez, subrayó en rueda de prensa que se toman «nuevas medidas de control y vigilancia para evitar la propagación de la enfermedad, asociada al ingreso de las aves migratorias, aunque las palomas y otras especies regionales pudieron ser vectores del mal”.
En este sentido, destacó que se han desplegado ocho brigadas del Senacsa con 24 técnicos en 15 vehículos, paravigilar las zonas de Mariscal Estigarribia, y las colonias Neuland y Filadelfia de la región del Chaco.
“Los casos de influenza aviar en el Chaco no afectan al estatus sanitario, ni al comercio nacional e internacional de los productos y subproductos avícolas”, indicó Ramírez en su intervención.
Asimismo, el Senacsa insta a los productores del sector avícola y a la población en general a notificar sobre sospechas de enfermedades en las aves, para proceder a su atención inmediata.
Entre los síntomas clínicos, el ente refiere la falta de apetito, la disminución en la producción de huevos o con cáscaras blandas, jadeo y secreción nasal, diarreas, edemas faciales, movimientos circulares o descoordinación o postración de las aves de corral.
